El III Foro de Innovación y Transición Energética, organizado por la Cámara Ecuatoriano Británica (BRITCHAM UIO), se inauguró en el Swissôtel de Quito. Un espacio que congrega puntos de vista del sector y promueve la transición energética para el país.
Ecuador enfrenta tres desafíos en su proceso de transición energética: seguridad, equidad y ambiente. La seguridad energética es esencial para garantizar un suministro constante y confiable de energía. El acceso justo a los beneficios de esta transformación, sin que existan grupos rezagados, asegura la equidad. La protección del ambiente para reducir la huella de carbono y luchar contra el cambio climático son otros aspectos que no pueden quedar fuera de la reesturación que se requiere.
José Ramón Gómez, especialista y líder regional de energía, menciona la relevancia del financiamiento gubernamental y la confianza que se debe generar en la ciudadanía acerca del proceso de transición energética. Asimismo, la inversión en tecnologías limpias y sostenibles es esencial para garantizar su éxito y la tranquilidad que se brinde, en este aspecto, a la población son factores clave para atraer recursos necesarios y aprovechar los que ya se tienen.
Linda Chimborazo, coordinadora técnica del Comité Ecuatoriano del Consejo Mundial de Energía, sostiene que la transición energética requiere ser humanizada; es decir, la enseñanza sobre la importancia de las energías limpias y sostenibles debe ser incorporada en los programas educativos desde el nivel escolar. Chris Campbell, embajador de Reino Unido en Ecuador, explica la transición energética como un proceso gradual, además, afirma que el cambio solo comenzará si la población está convencida de que es necesario.
Este foro representa un espacio de diálogo y consenso en el camino hacia la descarbonización total de Ecuador en 2050 y el cumplimiento con los objetivos de la Agenda 2030 de Naciones Unidas.
